A raíz del post de la semana pasada, Sergio me recomienda el siguiente vídeo: La educación prohibida (en el que muchas de las cosas que habla Ken Robinson se repiten) . Ya me lo habían recomendado, pero hasta hoy no había priorizado las 2 horas y media que dura para verlo.
Merece la pena verlo entero, y como dice Sergio, no te deja indiferente.
Lo que menos me ha gustado es el perfil «autoriatario» que han exagerado en los profesores.
El tema de la educación, es un tema que me interesa y me atrae much0, por ser la base para – como dijo Freire- transformar las personas que transformen el mundo.
A lo largo de la vida, vas aprendiendo, te vas educando y todos los escenarios (familia, escuela, amigos, sociedad, trabajo,…) te aportan y son igual de importantes ya que educación no es sinónimo exclusivo de «escuela».
El sistema educativo formal que tenemos es el producto (o herramienta) de la sociedad en la que vivimos para producir «borregos» tal y como muestra el siguiente vídeo (también rescatado este fin de semana)
Para mí: la escuela, el instituto, la universidad me han aportado muchas cosas[1], pero si pienso en lo que me han quitado (creatividad, conciencia crítica y social, capacidad de trabajo en equipo,…) y en lo poco que se he aprovechado ese tiempo, me enfada y decepciona!
Sin duda, personalmente, mis principales escuelas han sido: mi querida familia y todo lo que he vivido (bueno y no tan bueno) con ella; ESF Galicia: una gran escuela de personas voluntarias, críticas y soñadoras que trabajan para transformarse y transformar el mundo; y el collage de experiencias y personas que he ido conociendo (erasmus, iCarto, 15M, ahora Brasil,…).
Coincido con el vídeo en que no hay una «verdad absoluta» o sistema educativo perfecto o mejor. Pero sí que creo que el sistema educativo público podría ser mucho más transformador de lo que actualmente es. No matando la creatividad, curiosidad y potencialidades de las personas; no clasificando y estimatizando a las personas por sus «notas»; motivando e incentivando el aprendizaje individual y colectivado; no estimatizando los errores; fomentando conciencas críticas y responsables de sus actos, actitudes y decisiones;…
La cuestión es: cómo hacerlo? cómo mejorar el sistema educativo público? y más en estos tiempos de recortes de educación y políticas educativas elitistas.
[1] y recuerdo con especial cariño a aquellas profesoras y profesores (de escuela, instituto y universidad) que me motivaron a mejorar personalmente (estando siempre en la fase reto) y a aprender de verdad (los cuento con los dedos de una mano, infelizmente).